Por fin Viernes, y no cualquier viernes, ¡es el último viernes de desescalada en muchas zonas de España! Después de todo lo que hemos sufrido: el miedo, la frustración y el encierro, vemos la luz al final del túnel. Durante esta crisis sanitaria, muchos no os habéis acercado al médico por si os contagiabais, es normal y perfectamente comprensible.

Aún nos queda mucho camino por recorrer, el primer paso es acostumbrarnos a la nueva normalidad, a cuidarnos de nuevo, a salir, a querernos cerca y bien de una vez por todas. Queremos volver a ese momento en el que la expresión “el roce hace el cariño” tenía sentido. Y, hablando de ese momento… e interesándonos por tu bienestar y el de los que te rodean… igual es hora de que vengas a vernos, ¿no? Porque adaptarse a la nueva normalidad va a ser difícil, pero lo será aún más sin los pequeños placeres de la vida. Ahora en verano, el bañador, la playa, la piscina, vivir casi sin  ropa… un pequeño empujón nunca está de más y es que las varices afectan a un porcentaje importante de la población, el 65% de la sociedad las manifiesta (75% mujeres y 25% varones)
No queremos que esto te condicione a la hora de quitarte ropa, porque salir a la calle en pleno agosto es toda una aventura y aún más en pantalón largo y, está claro que después del encierro quedarnos en casa no es una posibilidad. Sentirse sano y seguro es una prioridad.